El lenguaje se asocia frecuentemente a conductas como hablar, leer, escribir, entre otras. Sin embargo el lenguaje abarca múltiples habilidades y se construye a partir de las mismas.
La conducta verbal se interesa por la función del lenguaje, definida como el efecto que el hablante tiene en el escucha y se deriva de la ciencia de la conducta y de sus aplicaciones. (Greer, 2014).
El lenguaje es una conducta que adquiere funciones a partir de la interacción con el medio social en el cual se desenvuelve la persona. Dicho de otra manera, el lenguaje se forma a partir de las experiencias en un contexto que se conforma de otras personas.
Como bien se mencionaba anteriormente, la conducta verbal se compone de hitos en el desarrollo que se relacionan entre sí y permiten el aprendizaje de múltiples habilidades así como la independencia.
Uno de estos hitos que se mencionan, es la capacidad de escucha. “La instrucción de escucha es esencial para el desarrollo de otros repertorios verbales como, por ejemplo, primeros ejemplos de conducta de hablante, respuestas ecoicas y conducta social.” (Novak y Pelaez, 2004).
El seguimiento de instrucciones forma parte de la enseñanza de la capacidad de escucha, lo cual va más allá de realizar lo que otra persona indica. Este tiene como objetivo formar una correspondencia entre el habla de otra persona, atender a su voz y responder a ese estímulo. Sin embargo el atender a la otra persona, es decir el interés por otros, es necesario para el aprendizaje de la habilidad de escucha.
Es por ello que de las capacidades atencionales son un requisito importante. Dentro de estas se encuentran el permanecer sentado en una postura correcta, el contacto visual que implica que la persona se interese por ver al otro así como habilidades de imitación e imitación generalizada.
Además del seguimiento de instrucciones, el naming también forma parte de la habilidad de escucha. Este se refiere a “la capacidad de responder como escucha tras escuchar incidentalmente una palabra dicha por otra persona.” (Greer, 2014)
Esta habilidad se enseña a través de procesos de igualación y selección.
Añadido a la definición de conducta verbal que se plantea al inicio, es importante comprender que esta se compone de bases que permiten la adquisición de múltiples capacidades que conducen al aprendizaje de habilidades cada vez más complejas que permiten a la persona desenvolverse con otros y a su vez de manera independiente.
Referencias:
- Greer, Douglas; Ross, Denisse. (2014) Análisis de la conducta verbal. Madrid, España.